En cumplimiento de la modificación parcial de la Instrucción sobre organización y funcionamiento de los centros educativos durante el periodo de suspensión de actividades educativas presenciales con el objetivo de frenar la expansión del COVID-19, nuestro centro permanecerá cerrado.
El servicio de mensajería de la Plataforma educativa Rayuela será el cauce de comunicación con los docentes del centro.
Apelamos a vuestra comprensión ante las molestias que ello os pueda ocasionar.
El pasado viernes, 28 de febrero, y tal y como reza el himno de Extremadura, “nuestras voces se han alzado” y todos juntos hemos entonado el cántico de todos los extremeños, nuestro cántico.
Pero la jornada dio mucho más de sí. Con motivo de la celebración del día de nuestra Comunidad, y con la inestimable ayuda de muchos de los abuelos de nuestro alumnado, el porche de nuestro centro se ha convertido en una enorme cocina donde nuestros mayores nos han enseñado el proceso de elaboración de uno de nuestros más emblemático platos, las migas, de las cuales hemos dado buena cuenta.
Y para “bajar” las migas, que mejor que un poco de baile, en este caso al ritmo de uno de los temas folklóricos más emblemáticos de nuestra zona “Ave María”.
Sin duda una gran mañana empapándonos de la cultura de nuestra tierra.
El pasado 26 de febrero, miércoles, los pequeños del cole se han puesto manos a la obra y ¡se han convertido en panaderos por un día! Hemos visto los ingredientes del pan y han disfrutado de lo lindo amasando y haciendo pequeñas figuras.
Agradecemos a Cristi y Víctor su colaboración en esta actividad, tanto por la aportación de los ingredientes como la posterior cocción de nuestros panecitos.
El pasado 21 de febrero, viernes, con motivo de la celebración del Carnaval en nuestro centro, las calles de nuestro pueblo se llenaron de música y colorido.
Antes de comenzar el pasacalles, y como cada año, los alumnos de 5º y 6º de primaria trataron de contagiar toda la alegría de esta fiesta a los mayores de nuestra localidad, que nos agasajaron con una estupenda merendola.
Toda clase de animales se echaron a la calle: desde la diminuta mariquita hasta el feroz rey de la selva. El movedizo gusanito y la trabajadora abeja se afanaban por dejar atrás al singular caballito de mar. A su vez, el escurridizo pez no dejaba de aletear y a duras penas conseguía dejar de escuchar al parlanchín pájaro de extravagante plumaje que llevaba detrás. Tras ellos llegaba el turno de los más soñadores formado por esa gallinita que anhelaba volar y un rayado mamífero que tan siquiera el pijama se llegó a quitar.
Antes de regresar al centro tuvieron lugar nuestros ya tradicionales bailes en el Paseo, que hicieron las delicias de todos los asistentes.
